
Estoy segura de que alguna vez tú también te habrás preguntado:
¿Qué es el Talento?
¿Tengo yo alguno?
¿Y, si lo tengo, cómo puedo desarrollarlo?
¿Te gustaría conocer tu talento?
¿Te gustaría desarrollarlo, sentirte realizado y feliz, utilizando todo tu potencial, tanto a nivel personal como profesional?
Para empezar, quiero decirte que todos nacemos con grandes talentos naturales, que se expresan de forma diferente en cada uno de nosotros, y que todos podemos desarrollarlos, según nuestras capacidades y circunstancias.
La mayoría de las personas aún no los han descubierto y, por lo tanto, no son conscientes de lo que en realidad son capaces de hacer.
Irónicamente, una de las principales razones por lo que esto ocurre deriva de cómo es nuestro sistema educativo que, no sólo no te ayuda a descubrirlo, sino que muchas veces causa el efecto contrario.
Hay personas que tienen habilidades y aptitudes que pasaron completamente inadvertidas en la escuela o en su entorno más cercano.
Estos problemas no terminan cuando dejamos el colegio, a menudo siguen reproduciéndose también en el mundo laboral, minando la motivación y el sentido de identidad.
Si en tu experiencia educativa o laboral no has encontrado el marco ideal para desarrollar tu potencial ¿por qué no hacerlo ahora?
La buena noticia es que no hay una edad establecida para desarrollarlo, el talento no se pierde, sigue allí esperando que tú hagas algo para actualizarlo.
La Escuela del Talento no es una escuela de verdad.
No tienes que levantarte pronto por la mañana, ni hay que hacer deberes. Nadie te va a interrogar o castigar si no das la respuesta esperada. Simplemente, es un espacio en el que tendrás la oportunidad de hacer por fin lo necesario para descubrir y utilizar tus pasiones y competencias, tus puntos fuertes y habilidades, por ti mismo, acompañado paso a paso, de una forma fácil y divertida.
Mi objetivo es el de ofrecerte una visión amplia de la habilidad y creatividad humana y acompañarte en el proceso de descubrir los beneficios que supone conectar correctamente con tus talentos, recursos e inclinaciones naturales.
En la Escuela del Talento sólo necesitas ser quién realmente eres, descubrir aquello que, de forma natural, se te da bien y te entusiasma y, si te apetece, hacer algo con ello.
Seguro que te estarás diciendo a ti mismo:
“Bueno, ahora que lo pienso, yo para tal cosa hubiera valido, claro, si le hubiese podido dedicar tiempo…….”
¡Cuidado! No desarrollar tus talentos se convierte con el tiempo en una fuente de insatisfacción y, a veces, de frustración.
Si ahora yo te hiciera la pregunta:
¿Qué es lo que más deseas alcanzar en tu vida?
Muy probablemente, responderías ¡Ser feliz!
Pero la felicidad no es un fin, sino una consecuencia.
Somos felices cuando nos sentimos satisfechos con lo que hacemos o nos sentimos útiles, queridos o valorados por los demás.
Aquí arriba encontraras algunos de los testimonios de personas que han podido desarrollar su Potencial y Talento con éxito gracias al Sistema EdT.
En la Escuela del Talento, encontrarás por fin tu lugar. En él confluyen las cosas que te encanta hacer, las que haces sin esfuerzo, las que te dan alegría y te regeneran.
¿Sabes? A veces necesitamos que otra persona nos ayude a reconocer nuestros verdaderos talentos, alguien que nos enseñe a liberar nuestro potencial, alguien que confía en ti, que te reconoce y te da el empuje adecuado para ser lo que eres, para que puedas hacer lo que sabes hacer con alegría y pasión.
Las personas tienen mas éxito cuando hay otras que entienden y reconocen sus talentos y habilidades personales, así que éste es el objetivo de la Escuela del Talento, ofrecerte una forma innovadora de conectarte con tu identidad más profunda, ver quién eres, sentirte a gusto en tu piel, conectado con tu energía y la energía de los demás, sentirte feliz y realizado y, si te apetece, hacer algo más con ello….

El Don del Talento
Desde que tengo memoria de mi misma siempre he oído hablar de talento.

¿Todos tenemos Talento?
Estoy segura que algunas veces te has preguntado que es el Talento y si tu tienes alguno…